Bitcoin, la principal criptomoneda del mundo, está diseñada para actuar como una opción de pago o dinero fuera del control de terceros. El uso de la criptomoneda, que está descentralizada y es peer-to-peer, elimina la participación de terceros, como los bancos centrales. Esta promesa de Bitcoin ha redefinido el panorama financiero, ha ayudado a los no bancarizados y ha empoderado a quienes desean independencia. Sin embargo, el ecosistema tiene su parte de críticos, incluidos los bancos centrales.
El papel de los bancos centrales se reduce a medida que crece el ecosistema de Bitcoin y se expanden sus casos de uso. Esta creencia predominante está validada por una cantidad creciente de investigaciones de instituciones financieras y bancos centrales que evalúan la naturaleza disruptiva de Bitcoin. La narrativa cada vez mayor se centra en el papel de Bitcoin en la promoción de la desigualdad y su potencial para alterar las políticas de los bancos centrales.
El papel de Bitcoin en la distribución de la riqueza
Un tema de los estudios de los bancos centrales destaca el papel de Bitcoin en la distribución de la riqueza. Para ayudarnos a comprender el papel de Bitcoin, analizamos dos documentos publicados por el Banco Central Europeo. El primer documento, publicado después del fiasco de FTX en 2022, se titula "La última resistencia de Bitcoin", que ve a la principal criptomoneda como un proyecto monetario fallido que se acerca a su fin.
Pero en 2024, cuando Bitcoin alcanzó un máximo histórico, los mismos investigadores presentaron otro estudio, presentando a Bitcoin de manera positiva. El documento argumentaba que las criptomonedas pueden impactar la distribución de la riqueza, pero solo los primeros poseedores se hacen más ricos. Dado que el uso de Bitcoin o criptomonedas no produce un producto o servicio, el aumento de la riqueza de los primeros usuarios proviene del consumo reducido de todos los demás miembros de la sociedad.
¿BTC interrumpe las políticas monetarias?
Otras investigaciones relacionadas con las finanzas analizan el impacto de Bitcoin en las políticas monetarias. Por ejemplo, la Reserva Federal de Minneapolis argumenta que cuando las personas pueden mantener y usar Bitcoin, es difícil para el estado ejecutar déficits presupuestarios regularmente.
Tradicionalmente, el gobierno puede simplemente ofrecer bonos en caso de que haya un déficit en la recaudación de ingresos. Pero los gobiernos solo pueden gastar lo que suelen recaudar si hay Bitcoin. El estudio sugiere dos opciones: una, prohibir la adopción de Bitcoin y dos, gravar este activo.
Además del artículo de Minneapolis, un documento de política del FMI en 2023 destacó el efecto de Bitcoin en la política monetaria. El documento sostiene que Bitcoin impacta la política de un estado, y los mercados emergentes son los más vulnerables. Como solución, los investigadores recomiendan fortalecer primero sus políticas monetarias antes de prohibir Bitcoin.
## Los bancos centrales y las instituciones financieras ahora se toman en serio a Bitcoin
Estudios e investigaciones recientes de bancos centrales indican que Bitcoin está redefiniendo las finanzas. Si bien estos documentos no reflejan las ideas y el pensamiento de los responsables políticos en estas instituciones, nos dan una idea de cómo la industria ve a Bitcoin. Algunas políticas recientes, incluidas las recomendaciones de rescate de Argentina del FMI en 2022, incluyen algunas disposiciones contra las criptomonedas.
La continua popularidad de Bitcoin se está convirtiendo en un obstáculo para muchos bancos centrales en sus esfuerzos por crear políticas monetarias. Uno de los principales objetivos de los partidarios de Bitcoin es ofrecer al público un panorama financiero alternativo libre de la dirección, o no, de las garras de los bancos.
Imagen destacada de Dall-E, gráfico de TradingView